En el mundo empresarial, la gestión de riesgos y oportunidades es una actividad clave para el éxito y la competitividad de las organizaciones. Sin embargo, no siempre se cuenta con las herramientas adecuadas para realizar esta tarea de forma eficiente y efectiva.
Existen herramientas básicas de gestión: desde las creadas inhouse desde una aplicación en excel, hasta otras más sofisticadas desarrolladas en lenguajes de programación, y el que se aplican métodos diversos, como modelaciones de datos, árboles de fallos, árboles de eventos, FMECA, entre otros, dependiendo la naturaleza de la evaluación.
En general, cuando se tiene un sistema de gestión de riesgos y oportunidades, lo más importante es entender que el sistema le permita valorar los riesgos y oportunidades, valorarlos y gestionarlos de manera adecuada; esto es, asignarle una prioridad, un responsable, un presupuesto, establecer el hacer, el cronograma, el tiempo en que se ha de hacer, determinar los indicadores de cumplimiento y los momentos y niveles organizacionales en que ellos se han de informar.
Una vez que se cuenta con un sistema de gestión de riesgos y oportunidades, lo esencial es que el sistema facilite la evaluación, la priorización y el manejo de los riesgos y oportunidades; es decir, que permita asignar una importancia, un encargado, un costo, definir las acciones, el calendario, el plazo, establecer los criterios de seguimiento y los momentos y niveles organizacionales en que se deben reportar.
En conclusión, la gestión de riesgos y oportunidades es una herramienta fundamental para el desarrollo y la innovación de las organizaciones. Para ello, se requiere de un liderazgo efectivo, un compromiso colectivo y una cultura de aprendizaje. Así, se podrá enfrentar los desafíos del entorno, generar valor agregado y satisfacer las expectativas de las partes interesadas.
